Jenny Rissveds: El duro camino de vuelta a la cima

Durante mucho tiempo, la ciclista de montaña sueca Jenny Rissveds fue considerada una corredora modelo que ganaba medalla tras medalla. Pero su frágil naturaleza albergaba peligros. Bajo la presión del éxito que los socios, el público y las federaciones ejercieron sobre ella al principio, pareció romperse hasta que dejó el deporte y no quiso saber nada más de él durante dos años. El año pasado volvió con un nuevo equipo propio, el Team 31, abriéndose paso carrera a carrera hasta ganar la Copa del Mundo de Lenzerheide 2019. El resultado fue un ataque de llanto en la meta. Demostró que es una verdadera campeona, porque un verdadero campeón nunca se rinde. Ahora le esperan los Juegos Olímpicos. ¿Puede y quiere defender su título?

por Rolf Fleckenstein

Parece que casi no ha pasado el tiempo desde que Jenny Rissveds nos iluminó desde la portada de nuestro primer número 1/2014 hace seis años. Por aquel entonces estaba de enhorabuena, evidentemente le iba bien, seguía corriendo para el Scott-Odlo Racing Team, conquistando podio tras podio y los mayores triunfos aún estaban por llegar. El mundo de Jenny aún parecía estar perfectamente bien, pero una fuerza oscura ya estaba acechando en la distancia, esperando que ella tropezara. Sus resultados entre 2011 y 2016 son un testimonio del éxito constante y creciente de la joven sueca en el ciclismo de montaña: múltiple campeona de Suecia en varias disciplinas, innumerables podios y victorias en la Copa del Mundo, líder de la clasificación de la Copa del Mundo, medalla de bronce en los Campeonatos del Mundo (sub23) y luego, en 2016, sus mayores éxitos con la medalla de oro en los Campeonatos del Mundo (sub23) y el oro en los Juegos Olímpicos de 2016 en Río de Janeiro, alcanzando así las metas más altas posibles en su deporte. Todo parecía perfecto, la felicidad absoluta y eso podría haber continuado, pero luego la ruptura y la ruptura con la competencia internacional.

La ruptura con el ciclismo de montaña internacional
En la época de los Campeonatos del Mundo y de las Olimpiadas, siempre se oían las molestas discusiones de fondo, cómo la federación nacional sueca y los patrocinadores, especialmente el Scott-Odlo Racing Team de entonces, discutían sobre qué patrocinadores debían representar a Jenny Rissveds en las competiciones internacionales, por ejemplo, qué marca de casco y qué ropa podía o debía llevar, y en el proceso se ejercía una presión despiadada y poderosa sobre la delicada atleta. A principios de los 20 años, uno todavía no es tan estable psicológica y mentalmente como una persona con una experiencia vital considerable, es impresionable y todavía no puede defenderse tan bien de la presión ejercida por terceros. Debido a los acontecimientos y a la fuerte reacción de Jenny Rissveds -dejó el equipo Scott-Odlo a pesar de sus enormes éxitos, lo que dice mucho de la relación con este equipo- hay que sospechar que los patrocinadores y socios presionaron demasiado a la joven atleta hasta que no pudo hacer más que tirar de la cuerda.

¿Quemado?
La propia Jenny no aporta mucha información sobre el difícil momento y creo que sería presuntuoso esperar que alguien implicado sea capaz de analizar profesionalmente el trasfondo de su reacción y ruptura con el propio deporte. Pero cuando alguien se aleja de un grupo, debe haber un conflicto entre ambos. ¿Pero había algo más? Hoy Jenny habla de ayudar a los niños a ser capaces de desarrollar ...