Sir Bradley Marc Wiggins: el todoterreno

El hijo de un ciclista australiano conquista las coronas del ciclismo. En 2012, fue nombrado caballero por la Reina de Inglaterra en honor a sus gloriosos éxitos. Sin embargo, hasta llegar a este momento único en la realeza, pasó por varios vuelos y golpes de suerte.

por Bruno Fleckenstein

Bradley Wiggins creció en el barrio londinense de Kilburn, casi en el centro de la metrópoli inglesa. No muy lejos de su barrio, uno se encuentra con skinheads, mods y rastafari. Se unió a los Mods, cuyos orígenes se encuentran en las clases trabajadoras y la clase media baja. Los mods (derivado de modernista) fueron una subcultura que estuvo presente sobre todo en el Reino Unido a principios de los años 60 y que volvió a ponerse de moda a principios de los 80. Los trajes hechos a medida y la ropa de marca cara, así como la posesión de una moto italiana, eran una parte importante de la identificación de este movimiento. "The Jam" es una banda que pertenece a la segunda ola del movimiento mod y Bradley la describe como una de sus bandas favoritas. También hay, como es lógico, unos cuantos scooters en su garaje.

La difícil relación con el padre Gary
Hijo del ciclista australiano Gary Wiggins, nació en la ciudad belga de Gante el 28 de abril de 1980. El ex piloto de carreras Maurice Burton informó en una entrevista en 2012 que Bradley recibió su segundo nombre "Marc" porque su padre quería construir la marca BMW a partir de sus iniciales. En su autobiografía "In Pursuit of Glory" (En busca de la gloria), publicada en 2008, Bradley Wiggins habló de la difícil relación con su padre. Su padre lo abandonó cuando tenía sólo dos años y no tuvo contacto con él durante 14 años. Junto con su madre Linda, su hermano Ryan, su padrastro Brendon y sus abuelos, creció en circunstancias modestas. Llama la atención que, al igual que su padre, buscara una carrera en el ciclismo. ¿Es una coincidencia, está en los genes o fue un intento de acercarse a su padre por la pérdida en la infancia? En lugar de las habituales estrellas del fútbol inglés, sus paredes estaban colgadas con carteles de estrellas del ciclismo, especialmente el de Miguel Indurain, su ídolo español.

El largo camino a la fama
Si se echa un vistazo a la carrera de Bradley Wiggins, se observan llamativos altibajos, pero también una notable capacidad para cambiar y mejorar, pasando de ser un exitoso profesional de la pista que ganó el oro a convertirse en el mejor ciclista de carretera del mundo en 2012, razón por la que le llamo un todoterreno.....

 

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