Mundial de Fútbol 2018: El campeón del mundo se va de vacío en su estreno

El inicio de Alemania en el Mundial 2018 es igual de flojo que el de Argentina y Francia, pero con la gran diferencia de que la campeona del mundo pierde y pega su primer partido.

Ya se sabía antes del partido que los mexicanos jugarían con agresividad. Junto con los argentinos y los brasileños, los mexicanos son serios aspirantes a la Copa de Centro/Sudamérica. No tomar en serio a un equipo tan importante significa una sentencia de muerte en términos de juego en un torneo. Sin duda, este error no le habrá ocurrido a la selección alemana. Sin embargo, los mexicanos impresionaron con una defensa hombre a hombre que fue todo un espectáculo, especialmente en la primera mitad del partido. Aunque no convencieron en ataque -fallaron demasiadas ocasiones-, supieron aprovechar uno de sus contragolpes para tomar una merecida ventaja de 1:0. Pero los jóvenes jugadores de México también mostraron una buena faceta de juego. A menudo fueron capaces de superar a sus homólogos alemanes. Los alemanes, por su parte, no lograron un ataque sensato en la primera parte. Por lo tanto, la ventaja mexicana en el descanso estaba plenamente justificada. La segunda parte comenzó igual que la primera: los mexicanos, combativos y técnicamente excelentes, hicieron casi imposible que los alemanes se acercaran al área de 16 metros. Sin embargo, a medida que avanzaba el partido y entraban en juego nuevos jugadores como Neuer y Gómez, los alemanes aumentaron su habitual presión y, de repente, las ocasiones de gol se multiplicaron. Suele ser fatal meterse atrás contra una selección alemana. Pero a los alemanes también les faltó un poco de suerte aquí y allá. Hacia el final del partido, estaba claro que los mexicanos sólo se preocupaban por sobrevivir y salvar el 1:0. La suerte les acompañó y dieron la pequeña sorpresa del día: México gana el partido inaugural del Mundial, los campeones del mundo pierden. La suerte estuvo hoy del lado de los valientes.